domingo, 10 de agosto de 2008

Matar a Moooe, ¡iiiiiiiii!

Doy gracias a Dios por mi (casi) infinita paciencia, porque ayer estuve a punto de asesinar a un mínimo de diez clientes. Para colmo, para un fin de semana que me dejan en el Cervantes pasó algo interesante en el Palafox. La palomitera se quemó y una llamarada casi chamusca al pobre Isaac. El nuestro sí que es un trabajo de riesgo.

2 comentarios:

José Ramón Grela dijo...

Jjajajaja Jo, es que tu curro da mucho juego, así cualquiera.

Anónimo dijo...

Me encanta.

A mi compañero del videoclub le pasa lo mismo, siente ganas de matar con según que gente.

Pero claro, cuando un viejo viene a diario para preguntarte sobre el argumento de una pelicula porno con perros o cabras; o cuando te preguntan sobre una pelicula donde actua una actriz rubia...

Los curros cara al público tienen su aquel.

Besos, reina.